Morelia, Mich., a 30 de Enero del 2019.- La Senadora de la República Blanca Piña Gudiño hizo un llamado al gobernador de Michoacán y a las autoridades federales, para que resuelvan, lo antes posible, el conflicto magisterial, pues tal parece que el trabajo en el proceso de federalización de la nómina no ha tenido eco con el mandatario Silvano Aureoles Conejo, ante su evidente insensibilidad con expresiones públicas inadecuadas, e incluso su ausencia en el territorio nacional cuando más se le necesitaba.
Se percibe, consideró, como un acto de soberbia y desentendimiento de sus obligaciones constitucionales, e incluso morales, con los ciudadanos michoacanos, por lo que la senadora consideró que si el gobernador reflejara algún mínimo interés hacia la problemática económica de las miles de familias de los docentes, quienes viven en riesgo de perder su patrimonio y estabilidad familiar, así como de consideración hacia los millones de ciudadanos que se ven afectados por su indiferencia, los maestros tomarían otra actitud.
Es tarde para tratar de endosar la culpa del problema al Gobierno Federal o a un partido político, e incluso, al Poder Judicial de la Federación, remarcó la representante de Michoacán ante la Máxima Tribuna de la Nación.
La senadora reconoció que el Gobierno del Estado puede acudir a los tribunales, puede exigir más recursos, puede inclusive solicitar el término de un acuerdo federal, pero lo que no puede es simplemente con silbidos emitir su opinión de menosprecio hacia un problema que puede derivar en ingobernabilidad.
Michoacán no está para la inestabilidad y es hora de que quienes buscan puestos de elección popular, dejen el discurso a un lado y se interesen por la población; quien buscó la gubernatura, sabía de esta situación, porque afortunadamente el mandatario no puede escudarse en la novatada administrativa, ha trabajado en las entrañas de la administración pública y, sólo tres años después, cuando los vientos políticos no le favorecieron, busca desentenderse de una obligación.
No obstante, la senadora michoacana le dio la razón al mandatario estatal, en cuanto a solicitar que todos deben ser auditados y entregar cuentas claras, pues en el proyecto de la Cuarta Transformación, la transparencia es una prioridad, sin embargo, dejó en claro que una cosa es el discurso y otra la disposición para entregar y abrir a la población las cuentas de la Secretaría, así como el registro de tres años de la nómina estatal.
Blanca Piña Gudiño reiteró su disposición para apoyar en las acciones que permitan destrabar el conflicto, por lo que ella realiza su parte en el Senado de la República, desde solicitar con tiempo una auditoría a la Secretaría de Educación michoacana, hasta recibir la información de las autoridades federales, con respecto al serio conflicto administrativo que vive la entidad en materia de administración de los recursos de éste y otros sectores.
Por último, refirió que espera que la decisión de desentenderse de la nómina magisterial no se trate de una revancha política por los resultados electorales del pasado proceso, ya que, si bien el movimiento magisterial favoreció al partido que ahora gobierna el país, lo cierto es que quedan muchas dudas sobre el porqué hasta ahora, y no desde hace tres años, Silvano Aureoles tomó la decisión de entregar la educación a la federación.